miércoles, 12 de enero de 2011

Cuando duerme un ángel


¿ Alguna vez habéis visto dormir a un ángel ? A un ángel de los de verdad. A un ser especial. Alguien que emana una clarividencia, una paz y perfección, imposible de alcanzar para nosotros. Hace unos días que me debía escribir algo especial. Algo cuasi perfecto, rinbombante, grandioso quizás. No lo he hecho, me he contenido. Me ha dado miedo mostrarme tan de cara, tan frontal y locuaz. Seguramente no lo habría conseguido, o sí, nunca lo sabré. He preferido escribiros en frío. En frío mentalmente, porque vitalmente, no he estado más vigoroso y fuerte jamás en toda mi existencia. Tengo ganas de vivir. Tengo ganas de hacer bien las cosas. De hacer lo que considere justo y correcto en cada segundo de mi vida. Sin importarme las falsas amistades, falsas palmaditas en la espalda y falsas sonrisas conejiles dibujadas en los patéticos y feos rostros de la gente sin alma. Gente sin karma, o con el karma muy negro. El milagro de la vida, porque aunque esté médicamente comprobado, todo lo que pasa durante una gestación de un ser humano, no deja de ser milagroso la máquina tan perfecta que se va ensamblando tan magistralmente durante nueve meses. Aunque luego utilicemos todo nuestro power en asuntos y decisiones inconfesables. Ese es nuestro signo. Somos seres humanos. Muy humanos.

¿ Alguna vez habéis visto dormir a un ángel ? A un ángel de los de verdad. A un ser especial.

Estoy seguro, que dentro de cada uno de vosotros puede haber un ángel. Más oculto, menos, pero a tiempo aún de mostrarlo a todos en su máximo esplendor.........

Por cierto, voy a hablar bajito, porque aquí a mi vera está durmiendo uno, uno de los de verdad, un ser especial........

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